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Para este proceso necesitamos los siguientes ingredientes:

 

• Jugo de manzana                                                                            →    6 botellas de 1 litro

• Sales de Epson (o citrato de magnesio)                                      →    cuatro cucharadas disueltas en tres vasos  de  ¼ de litro de agua

• Aceite de oliva extra virgen prensado en frío                            →     medio vaso (125 ml)

• Pomelo fresco (mejor el rosa) o

        limón fresco mezclado con naranja                                             →    ¾ vaso (180 ml) de jugo

• Dos jarras de agua, una tapa (o una botella con tapa)

 

 

   Seis días de preparación:

   → Debemos tomar 1 litro de jugo  de manzana natural envasado o recién preparado  cada día, durante seis  días seguidos (se  puede

        beber más de 1 litro si se desea).

 

• El ácido málico del jugo de manzana ablanda los cálculos y facilita su paso por los conductos biliares. 

• El jugo de manzana tiene un gran efecto depurativo, puede que durante los primeros días experimentemos inflamación y, ocasionalmente, diarrea. Gran parte de ésta es en realidad bilis estancada y liberada por el hígado y la vesícula (la caracteriza un color amarillo pardo).

• El efecto de fermentación del jugo ayuda a ensanchar los conductos biliares.

• Si no nos sentimos cómodos, podemos diluir el jugo de manzana en agua o recurrir a otras opciones. 

• El jugo de manzana debe beberse despacio a lo largo del día y entre comidas (no conviene beber jugo justo antes o durante las comidas, ni en las dos primeras horas posteriores, ni por la noche). Además del jugo de manzana, se debe continuar con  la ingesta normal de seis a ocho vasos de agua al día.

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Nota: es preferible utilizar jugo de manzana de cultivo biológico, si bien para la limpieza también sirve cualquier jugo de manzana comercial que sea bueno, o concentrado de manzana o sidra. Puede ser útil limpiarse la boca con bicarbonato o cepillarse los dientes varias veces al días para impedir que el ácido dañe la dentadura.

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Algunas recomendaciones:

 

* Dieta recomendada: durante la semana de preparación y limpieza no se debe consumir alimentos o bebidas frías, ya que enfrían el hígado y esto resta eficacia a la limpieza. Es conveniente que todos los alimentos o bebidas estén templados o a temperatura ambiente. A fin de ayudar al hígado a prepararse para la parte principal de la limpieza, conviene evitar los alimentos de origen animal, los productos lácteos y los fritos. Por lo demás, se puede seguir la dieta normal, pero sin comer en exceso.

 

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* El mejor momento para realizar la limpieza: es aconsejable realizar la parte principal y el final de la limpieza del hígado durante un fin de semana, cuando no se esta presionado por el horario laboral y se tiene tiempo suficiente para descansar. Aunque la limpieza es eficaz en cualquier momento del mes, es preferible llevarla a cabo entre la Luna llena y la Luna nueva. Conviene evitar que coincida con la Luna llena (ya que en esos días el cuerpo suele retener más líquidos en el cerebro y en los tejidos que en otros momentos). El día de Luna nueva es el más propicio para la limpieza y la curación.

 

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* Ingesta de medicamentos: durante el proceso de limpieza hepático no deben tomarse medicamentos, vitaminas o suplementos que no sean absolutamente necesarios. Es importante no sobrecargar el hígado con esfuerzos adicionales que interfieran en el proceso de la limpieza hepática.

 

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* Antes y después de realizar la limpieza hepática es preciso limpiar bien el colon: el hecho de evacuar con regularidad no indica necesariamente que el intestino este libre de cualquier obstrucción. Una limpieza del colon unos días antes o, mejor aún, en el sexto día de preparación, contribuirá a evitar o minimizar toda molestia o nausea que pueda surgir durante la limpieza del hígado, pues evita el reflujo de la mezcla de aceite o de productos residuales del tracto intestinal al estomago, a la vez que ayuda al cuerpo a eliminar rápidamente los cálculos biliares. La irrigación del colon realizada por un profesional (hidroterapia de colon) es el método más rápido y fácil de prepararse para la limpieza hepática propiamente dicha.

 

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* Qué hacer el sexto día de la ingesta de jugo de manzana: este día debemos tomar el litro de jugo de manzana  por la mañana. Podemos empezar poco después de despertarnos. Si sentimos hambre por la mañana, lo mejor es tomar un desayuno ligero, por ejemplo, un cereal caliente, la avena, puede ser una buena opción. Conviene evitar el azúcar u otros edulcorantes, especias, leche, mantequilla, aceites, yogur, queso, mermelada, huevos, frutos secos, productos de pastelería, cereales fríos, etc. Podemos comer/tomar fruta o jugos de fruta. Es recomendado consumir verduras hervidas o cocinadas al vapor con arroz blanco (preferiblemente arroz basmati), sazonado con un poco de sal marina o sal de roca sin refinar. No se debe tomar alimentos proteicos, mantequilla o aceite, puesto que estos productos pueden provocar malestares durante la limpieza; a partir de las 13:30 sólo debemos consumir agua, cualquier otro  producto dificultaría el paso de los cálculos.

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  → Limpieza hepática propiamente dicha → Se debe aplicar el siguiente programa al pie de la letra.

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