Rito o ejercicioN°1
Rito o ejercicioN°2
Se realiza con el objetivo expreso de acelerar los vórtices. Los niños lo hacen constantemente cuando juegan. Todo lo que tienes que hacer es pararte erguido con los brazos extendidos hacia los lados del cuerpo, de forma que los mismos queden en posición horizontal con respecto al suelo, luego gira. Una cosa importante es que debes hacerlo de izquierda a derecha. Al principio, puede que te sientas mareado, si consideras necesario sentarte o acostarte para recuperarte del mareo, hazlo. Practica el rito sólo hasta que sientas un ligero mareo, con el tiempo, a medida que vayas practicando los cinco ritos, sentirás menos mareo. Para disminuir esta sensación, antes de comenzar a hacer los giros fija la vista en un punto ubicado directamente frente a ti, cuando comiences a ejecutar los giros, continúa con la vista fija en ese punto mientras te sea posible, Finalmente, tendrás que liberar tu campo visual, de forma que la cabeza pueda girar con el resto del cuerpo. A medida que suceda esto, haz girar la cabeza muy rápido y vuelve a enfocar el punto original tan pronto como puedas. Este punto de referencia te posibilita sentirte menos desorientado y mareado.
El segundo rito, estimula aún más los siete vórtices, incluso es más fácil de realizar. En este rito, te tiendes sobre el suelo boca arriba, (es mejor acostarse sobre una alfombra gruesa) o sobre algún tipo de superficie acolchonada. Una vez estirado completamente sobre tu espalda, extiende los brazos a lo largo del cuerpo y pon sobre el suelo las palmas de las manos, manteniendo los dedos bien unidos, luego levanta la cabeza y aprieta la barbilla contra el pecho, levanta las piernas con las rodillas estiradas, hasta colocarlas en posición vertical, de ser posible, deja que las piernas se extiendan sobre tu cuerpo, hacia la cabeza, pero no permitas que se te encorven las rodillas. En seguida baja lentamente la cabeza y las piernas, sin doblar las rodillas, hasta tocar el suelo, deja que todos los músculos se relajen y luego repite el rito.
Con cada repetición se debe establecer un ritmo de respiración. Inspira profundamente mientas levantas las piernas y la cabeza. Expira todo el aire mientras las bajas. Entre una y otra operación, mientras dejas que se relajen los músculos, continua con el mismo ritmo de respiración, mientras más profundo respires, mejor será.
Si no puedes mantener las rodillas perfectamente derechas, entonces deja que se encorven tanto como sea necesario. Pero en la medida en que continúes realizando el rito, trata de enderezarlas lo máximo posible.
Rito o ejercicioN°3
Se debe practicar inmediatamente después del segundo. También es muy sencillo. Todo lo que se necesita hacer es ponerse de rodillas sobre el piso manteniendo el cuerpo erguido, las manos deben colocarse sobre los músculos de los muslos. Inclinas la cabeza y el cuello hacia adelante, apretando la barbilla contra el pecho, luego, tiras la cabeza y el cuello hacia atrás, tanto como te sea posible y al mismo tiempo te inclinas hacia atrás arqueando la columna a medida que te arquees utiliza tus brazos, como puntales, manteniendo las manos sobre los muslos para buscar apoyo, después de arquearte retorna a la posición original y comienza a hacer el rito nuevamente.
Al igual que sucede con el rito número dos, debes establecer un rítmico de respiración. Inspira profundamente mientras arqueas la columna y expira cuando regreses a la posición erguida. La respiración profunda es la más beneficiosa, así que toma todo el aire que te permitan tus pulmones.
Rito o ejercicioN°4
Rito o ejercicioN°5
Al principio es un ejercicio un poco difícil, pero a medida que lo realices notarás que es tan sencillo como los otros. Siéntate sobre el suelo con las piernas estiradas hacia adelante, con una separación entre los pies de 30 cm aproximadamente, con el torso erguido, coloca las palmas de las manos sobre el suelo de manera que queden al lado de tus glúteos. Posteriormente aprieta la barbilla contra el pecho. Luego, echas la cabeza hacia atrás lo máximo posible, a la vez levantas el cuerpo de manera que las rodillas se doblen mientras los brazos permanecen rectos. El torso quedará en línea recta con los muslos formando un plano horizontal con respecto al suelo. Los brazos y las piernas se mantienen rectos, perpendiculares al suelo, después tensa todos los músculos del cuerpo. Finalmente relaja los músculos mientras regresas a la posición original de sentado y descansas antes de repetir el procedimiento.
Una vez más, la respiración es muy importante para este rito. Inspira profundamente mientras levantas el cuerpo. Contén la respiración mientras tenses los músculos y expira completamente mientras bajas. Continúa respirando con el mismo ritmo cuando descanses entre las repeticiones.
Para realizar el quinto rito, debes colocar el cuerpo boca abajo y sostenerlo con las palmas de las manos, los dedos de los pies déjalos flexionados para realizar este rito. Debes colocar tanto las manos como los pies a una distancia de 30 cm entre si, y los brazos y las piernas los mantendrás rectos. Comienza con los brazos perpendiculares al suelo y la columna vertebral arqueada, de forma que el cuerpo quede flexionado, luego tira la cabeza hacia atrás lo máximo posible. Después flexiona el cuerpo a la altura de las caderas y colócalo en forma de V invertida, al mismo tiempo, echa la barbilla hacia delante, oprimiéndola contra el pecho, eso es todo lo que hay que hacer, regresa a la posición original y recomienza. Una vez que lo domines, dejas caer el cuerpo desde la posición alta hasta un punto muy próximo al suelo, pero sin que hagan contacto uno con el otro. Tensa los músculos durante un momento, tanto en la posición alta como en la baja.
Sigue aplicando el mismo patrón de respiración profunda utilizado en los ritos anteriores. Inhala profundo mientras levantas el cuerpo y exhala totalmente mientras lo bajas.
La única diferencia entre la juventud, el vigor, la vejez y la salud precaria es sencillamente la velocidad a la qué giran los vórtices.
El viejo se sentirá otra vez como nuevo si normaliza esa velocidad.