El sueño
La pregunta forma parte de los ritos del saludo matinal:
“Buenos días, ¿has dormido bien?”
Si la respuesta es “sí”, lo hará con un semblante de intensa satisfacción.
Si es “no”, es muy probable que sea un poco desagradable o apático.
El sueño juega un rol fundamental en nuestro equilibrio y en nuestra salud. Pero es sólo desde los años 50 que hemos comenzado a clarificar poco a poco los mecanismos de un fenómeno que ocupa un tercio de nuestra vida.
¿Cómo definir el sueño?
Un estado fisiológico periódico, caracterizado por la supresión de toda relación voluntaria consciente con el medio amiente. Esto es lo que describe bien la situación de ser que duerme, pero no precisa dónde se encuentra el centro de este fenómeno ni la manera en la que se desarrolla, ni los agentes que la regulan o la trastornan.
Muy esquemáticamente podemos decir que el centro el sueño se localiza en el cerebro. Investigadores han demostrado que el tronco cerebral contenía una estructura responsable del despertar, es decir, en cierto modo, de él hacia el sueño.
Esta estructura, denominada sistema reticular ascendente (SRA), estimula en permanencia el córtex, y es él mismo influenciado por los estímulos venidos del mundo exterior. Por lo tanto, elementos presentes igualmente en el cerebro inhiben esta actividad; el sueño sucede pues al hecho de estar despierto, mientras que los agentes neurotransmisores, como la serotonina o la noradrenalina, influyen sobre su calidad.
El desarrollo del sueño es hoy en día más conocido gracias a un sistema de investigación muy afinado, denominado registro poligráfico del sueño. Permite registrar de manera simultánea varios parámetros fisiológicos que se modifican durante el sueño. Se trata específicamente del electro-encefalograma, que mide la actividad eléctrica del cerebro, del electromiograma, que mide el tono muscular, del electro-oculograma, que detecta la llegada de movimientos oculares, y del electro-dermograma, que concierne la actividad eléctrica sobre la superficie del agua. Estos parámetros fisiológicos permiten identificar los diferentes estados del sueño en el transcurso de la noche, y sus resultados objetivos han permitido un avance considerable.
Fuente:
Mieux vivre, mode d’emploi, Larousse, psychologies magazine, 2002
http://enforma.salud180.com/nutricion-y-ejercicio/conoce-que-alimentos-te-generan-un-buen-sueno