Todos los humanos sentimos en algún momento de nuestra existencia en la Tierra, el llamado de nuestra Alma que nos recuerda sutilmente cual es nuestra misión en esta reencarnación.

 

• A veces no somos conscientes o no queremos tomar consciencia de ese llamado puesto que reconocemos en él el sacrificio que eso puede exigirnos y creemos no estar preparados para asumirlo.

 

• Otras veces lo escuchamos, pero avanzamos según nuestro mental y no según nuestro corazón. No nos gusta sentir, preferimos controlar.

 

• Y otras veces, abrimos el corazón y nos conectamos con la intuición sin saber realmente hacia dónde nos dirigirá, pero al mismo tiempo sentimos que es el camino correcto, al damos cuenta que ese camino significa servir; ayudar a otros a levantarse, a despertar, a sanar, a Amar, a amarse a sí mismos y respetarse, pero al mismo tiempo nos damos cuenta que el hecho de ayudar a otros nos permite también crecer nosotros mismos, que todo lo que damos también lo recibimos y que somos capaces de vivir experiencias que nos hacen vibrar y sentirnos conectados con el Universo, con el Creador, con el Todo, nos damos cuenta que somos parte del Todo.

 

Yo he decido responder a este llamado y mi lema es el Amor y el Servicio. Soy una gran idealista, sueño con un Mundo donde el perdón y la misericordia sean el pan de cada día, donde la Paz sea el vaso que alimente nuestra sed, donde el Amor sea el aire que respiramos en cada amanecer.

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Te invito a escuchar el llamado de tu Alma de luz, ella te recuerda el pacto que hiciste cuando decidiste venir a vivir esta experiencia en la Tierra, cuando decidiste venir a vivir una nueva experiencia para seguir evolucionando.

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