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Despertar Consciencia
del Buen Vivir
Es hemostática
Tiene la propiedad de detener las hemorragias, porque actúa como vasoconstrictor.
Es adecuada para combatir la metrorragia (hemorragia de útero fuera de la menstruación), la dismenorrea (menstruación difícil y dolorosa), la hemofilia (enfermedad hereditaria relacionada con el sexo y caracterizada por una propensión a las hemorragias abundantes internas o externas), los trastornos de menopausia y la hemoptisis (expulsión de sangre por vías respiratorias normalmente debido a una hemorragia en los pulmones).
Los dolores de la dismenorrea son producidos por la prostaglandina. El ácido acético que contiene la ortiga en sus pelos urticantes inhibe la producción de esta sustancia de naturaleza lipídica que actúa como una hormona. Y además la ortiga también contiene calcio, elemento indispensable en el proceso de coagulación de la sangre.
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Para combatir estos trastornos debemos tomar una cucharada al día de jugo de la planta fresca, que podemos obtener picando y tamizando la planta. También lo podemos conseguir en tiendas especializadas en medicina natural.
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En caso de hemorragias nasales, que pueden ser espontáneas, se puede utilizar otro método más rápido y fácil. Empapar una gasa o algodón con el jugo de la planta e introducirlo por la nariz.
Estimula el aparato digestivo
La ortiga tiene esta propiedad puesto que hace trabajar el páncreas, el estómago y la vesícula biliar y esto mejora el buen funcionamiento general del aparato digestivo.
La ortiga favorece la digestión gracias a la histamina que contiene en sus pelos urticantes por dos motivos:
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La histamina tiene la capacidad de aumentar las secreciones de los jugos gástricos del estómago. Así, aumentan las enzimas y el ácido clorhídrico, que son los encargados de hidrolizar las proteínas y los lípidos. Es decir, que será más fácil digerir cuanto más enzimas y ácido se segregue, porque se tendrá más capacidad para desmenuzar los alimentos más difíciles de digerir, como son los lípidos y las proteínas.
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Favorece los movimientos peristálticos, puesto que provoca la contracción de los músculos. Estos movimientos son los encargados de hacer avanzar el bol alimentario por el esófago y, más tarde, por los intestinos. Además estos movimientos ayudan a mezclar el bol alimentario con los jugos gástricos en el estómago y el quimo con la bilis, los jugos intestinales y los jugos pancreáticos en los intestinos. Es decir, los movimientos peristálticos facilitan la mezcla de los alimentos con los ácidos y por lo tanto, la fragmentación de los nutrientes y también ayuda al bol alimentario a avanzar por los intestinos. De esta manera, la ortiga favorece la digestión y la eliminación de excrementos del intestino, es decir, funciona como un laxante suave.
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Para conseguir estos efectos, en caso de problema con la digestión o estreñimiento se debe tomar una infusión de dos cucharadas de hojas secas por litro de agua, tres veces al día antes de las comidas.
También sabemos que la ortiga se utiliza como remedio casero para combatir la intoxicación
debido a la ingesta de moluscos y/o crustáceos.
Es astringente
Debido a la riqueza de taninos en las ortigas, especialmente en la raíz, son adecuadas para el tratamiento de la diarrea, puesto que estas substancias tienen la capacidad de trasformar las proteínas en productos resistentes a la descomposición.
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En este caso se debe realizar una decocción de la raíz seca durante diez minutos y tomar tres tazas al día.
Combate la ictericia y ayuda a la recuperación del hígado en caso de enfermedad hepática.
Los eritrocitos están formados por la hemoglobina que, a su vez, está formada por un grupo hemo y por el hierro. Cuando estos glóbulos no son funcionales el bazo los destruye y la hemoglobina se hidroliza, el hierro se reaprovecha para los nuevos eritrocitos y el grupo hemo se transforma en bilirrubina que se filtra por el hígado y después se excreta en forma de bilis. Pero, si existe un problema hepático y este proceso se altera, la bilis segregada por el hígado se acumula en la sangre y esto provoca la ictericia que se manifiesta con el amarillamiento de la piel, de los ojos y las mucosas.
La ortiga ayuda a combatir la ictericia, puesto que contiene los ácidos linoleico y oleico que favorecen la secreción de la bilis y porque contiene azufre que garantiza un buen funcionamiento del hígado.
Es anti-arteriosclerótica
La arteriosclerosis es una patología del sistema circulatorio provocada por la aparición de ateromas a las arterias. Los ateromas son unos cúmulos de naturaleza lipídica, básicamente colesterol, que se adhiere a la pared interior de la arteria dificultando así la circulación puesto que disminuyen el diámetro de la arteria en cuestión, y como consecuencia aumenta la presión sanguínea. Estos ateromas pueden llegar a formar coágulos que se desprenden y viajan por las arterias hasta que pueden taponar alguna provocando así la necrosis (muerte) de las células que se alimentaban a partir de esta arteria. Este hecho puede desencadenar, en los peores de los casos, una embolia cerebral o en un infarto si se trata de arterias que alimentan a las neuronas y a células cardíacas respectivamente.
La riqueza en clorofila de la ortiga activa y mejora la circulación sanguínea.
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Para mejorar la circulación y la hipertensión se debe tomar una cucharada al día de jugo de la planta fresca que podemos obtener picando y colando la planta. También lo podemos conseguir en tiendas especializadas en medicina natural. Además se debe vigilar la dieta, por ejemplo evitar la sal y las grasas.
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Tomar media taza al día, dividida por la mañana y por la noche, igualmente resulta útil para mejorar la circulación en los ojos por lo que mejora el tratamiento de la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo.
Es galactógena
La ortiga tiene la virtud de incrementar la producción de leche materna.
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Para conseguir este efecto, se debe tomar un caldo vegetal, realizado con ortigas y otras verduras o bien se debe tomar una infusión con una cucharada de hojas machacadas, minutos antes de dar el pecho.
Es antianémica
La anemia es una patología que se detecta cuando la concentración de hierro en la sangres disminuye. Pero el hierro se puede incorporar ingiriendo ortigas, por ejemplo, debido a que tienen un alto contenido y además contienen clorofila que estimula la formación de los glóbulos rojos.
Pero hay otras causas que pueden provocar anemia y que la ortiga también puede curar, como las causadas por falta de minerales y vitaminas puesto que contienen calcio, sales de hierro, silicio, cloro, cobre, zinc, magnesio y níquel y vitaminas B5, B2, B1, C, E y K.
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Para combatir la anemia se debe tomar un caldo vegetal, obtenido con ortigas y otras verduras. El porcentaje de hemoglobina y del número de glóbulos rojos se normalizará después de haber seguido este tratamiento durante tres a seis semanas.
Es diurética y depurativa
La ortiga tiene la propiedad de facilitar o aumentar la producción de orina gracias al potasio, la clorofila y los ácidos orgánicos que contiene. Además, el potasio hace perder el apetito y, por lo tanto, es adecuado para la gente que padece obesidad debido a la ansiedad por la comida.
Gracias a esta propiedad, la ortiga permite eliminar agua. Es, pues, adecuada para combatir la hidropesía, el reumatismo, el sobrepeso producido por la retención de líquidos y la ascitis, por ejemplo.
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Para esto se debe hacer una decocción de la raíz seca durante 10 minutos y tomar tres tazas al día o bien hacer una infusión con dos cucharadas de hojas secas por un litro de agua y tomarla tres veces al día antes de las comidas.
También permite eliminar toxinas de la sangre. Por tanto, es idónea para el colesterol, para eliminar el exceso de ácido úrico y la diabetes puesto que rebaja el nivel de azúcar en la sangres aunque no es una solución milagrosa que pueda permitir prescindir de la medicación habitual. Y además favorece la expulsión de las piedras del riñón y mejora la circulación puesto que elimina el exceso de calcio y de lípidos y también facilita la eliminación de cloruro y la Urea.
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Para esto se debe hacer una infusión con un puñado de ortigas y tomar 3 tazas al día.
Es antirreumática
Se realizó un estudio clínico a 152 personas con problemas reumáticos a los que se les administró 1,54 grs. diarios de jugo de ortigas. Al cabo de tres semanas el 70% de los pacientes reconoció un alivio notable de los dolores. Aún así, no está del todo comprobado cuál es el principio activo que combate el reumatismo, aunque se cree que puede ser el ácido fórmico.
En las tiendas especializadas en medicina natural se puede encontrar cremas que contienen este ácido para acabar con el dolor de articulaciones inflamadas, músculos o tendones.
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Se puede agregar, al agua caliente del baño, una infusión de ortigas para calmar un simple dolor de espalda o de rodillas. Antiguamente se frotaba la zona afectada con ortiga recién cortada, tratamiento que era muy eficaz, de hecho muchas personas aun lo practican.
Y es curioso que el cuervo intuyó esta propiedad, porque si le duelen mucho los huesos se estira sobre un hormiguero (recordemos que las hormigas también tienen este ácido como veneno) para que lo piquen hasta que ya no puede más y así fortalece sus huesos.
Es reconstituyente
La ortiga mayor es muy rica en minerales y vitaminas puesto que contiene, entre otros, hierro (indispensable para la absorción de oxígeno), calcio (necesario para la formación de los huesos y los diente y para la transmisión nerviosa), magnesio (la deficiencia del cual provoca errores en el crecimiento y problemas de comportamiento), e indicios de vitamina B, C y A (necesaria para un buen funcionamiento de la vista y mantenimiento de la piel). Por esto, tomar una infusión de ortiga es muy saludable para el crecimiento de los niños, para personas con problemas de mineralización, como reconstituyente tras romperse un hueso, o después de estar enfermo, debilitado o agotado o para realizar curas de primavera.
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Las curas de primavera consisten en tomar durante nueve días seguidos y en ayunas una infusión de ortiga con jugo de limón, su gusto no es demasiado agradable, sobre todo en ayunas si no se endulza un poco. A los veinte minutos ya se puede almorzar.
La ortiga combate la resaca que de buena mañana muchos padecen.
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Se debe hervir las hojas de ortiga durante cinco minutos, filtrarla y beber en ayunas un vaso con algo de jugo de limón.
También se puede seguir una fórmula antienvejecimiento a base de ortigas.
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Sólo se deben triturar, luego macerarlas durante 21 días en vino blanco (3/4 l) y beber un vaso pequeño cada día.
Además la ortiga también inhibe las infecciones debido a su contenido en ácido fórmico en los pelos urticantes. Este ácido cumple una propiedad antiséptica, es decir, evita la proliferación de microorganismos e impide su acción patógena.
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Para conseguir este efecto se debe tomar el jugo recien hecho con la ortiga fresca.
Aligera la quemazón de las úlceras
Las úlceras son unas llagas que se forman en la pared interna del estómago debido al exceso de secreción de jugo gástrico, puesto que contiene ácido clorhídrico que es corrosivo.
La ortiga es idónea para el tratamiento de las úlceras gástricas puesto que en sus semillas contiene ácido linoleico que es el precursor de las prostaglandinas, hormonas que bloquean la producción de jugo gástrico.
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Para conseguir incorporar el ácido linoleico de la ortiga se debe beber el aceite de sus semillas.
Aparte de bloquear la secreción de jugo gástrico, también se puede incorporar con una infusión de ortiga, la vitamina B (riboflavina) y mucílagos, que son los encargados de mantener la mucosa, capa que protege la pared interna del estómago del efecto corrosivo del ácido clorhídrico, de ahí que, en este tratamiento, no se debe tomar las raíces puesto que irritan la mucosa gástrica.
Problemas con las glándulas tiroides
La glándula tiroides está situada en la parte inferior y anterior del cuello y es la encargada de controlar el metabolismo y el crecimiento. Su funcionamiento está controlado por el hipotálamo.
Si se tiene problemas con la glándula tiroides o si se tiene bocio (aumento de medida de la nuez del cuello debido a un exceso de actividad de la glándula tiroides) se debe seguir una alimentación rica en yodo y se debe complementar el tratamiento con dos infusiones al día de diente de león y ortiga.
Alivia ciáticas
Contra los dolores de ciática, lumbago y neuritis de los miembros se emplean las Ortigas recién arrancadas, vivas, rozando con ellas suavemente las partes dolorosas. En el caso de ciática, por ejemplo, se sacude la planta fresca suavemente y despacio sobre la piel, empezando por el tobillo y siguiendo la parte exterior de la pierna hasta la cadera y desde allí pasando por la parte interior de la pierna hasta eltalón del pie. Esto se repite dos veces y finalmente se da una pasada de la cadera hacia abajo y a través de las nalgas. En otras partes afectadas se procede de la misma manera. Al final se pone polvos talco.
